HorariosDirecciónArquitectos guía
Descripción
El edificio en el cual se enclava el Colegio Mayor San Juan de Ribera tiene su origen en época islámica donde en Valencia eran frecuentes las agrupaciones de casas en torno a una torre fortificada. Una de estas fortificaciones se hallaba en Burjassot, lugar donde encontramos esta edificación. La torre musulmana se encontraba en un lugar muy estratégico, pues no solo guardaba la entrada a la ciudad de Valencia, sino que dominaba las vertientes del Turia y del Carraixet, así como los caminos hacia el noroeste de la capital.
La llegada de Jaime I a tierras Valencianas supuso un cambio demográfico al cristianismo, y con ello, la transformación de la torre musulmana en un castillo fortificado.
En el siglo XIV la propiedad de este edificio pasa a manos de micer Domingo Mascó, vicecanciller de la Corona de Aragón, el cual promueve la renovación de las defensas y la ornamentación, aún hoy conservada, del interior del castillo. En 1401, dada la insalubridad que presentaba la ciudad de Valencia, se celebraron Cortes en Burjassot, concretamente en su castillo, lo cual es indicativo de la importancia que dicho enclave tenía para la seguridad, tanto en el ámbito bélico, como en el de la salubridad.
En 1600 el lugar fue adquirido por el arzobispo de Valencia Juan de Ribera. Tras este cambio de titularidad, y cuatro años después, se decidió legar al Real Colegio Seminario de Corpus Christi, no solo el castillo sino también su dehesa. Las estancias que ocupó el santo arzobispo han llegado prácticamente intactas hasta nuestros días. Cabe indicar que, para un intelectual humanista como fue el patriarca Ribera, incluso la dehesa era un lugar proclive al estudio e investigación.
La desamortización de Mendizábal produjo la desvinculación del señorío de Burjassot respecto al Colegio de Corpus Christi y, en principio, ambas instituciones deberían haber seguido caminos disparejos. Ahora bien, la mencionada institución todavía conservaba la propiedad del castillo. Durante el Bienio Progresista se produjo la desamortización de Madoz, y ahora sí, las propiedades de la institución en Burjassot fueron subastadas y el dinero obtenido pasó a las arcas del Estado. La propiedad pasó por diversas manos. Uno de sus propietarios, Ignacio Lacuadra, de origen castellano, fue quien dotó al castillo de sus actuales almenas.
Sin embargo, la adquisición que resultó determinante para el futuro del castillo fue la de Carolina Álvarez Ruiz en 1894, quien pensó en destinar la propiedad a colegio mayor. Esto se convirtió en un hecho con la firma de su testamento definitivo en1912. Con todo, para que la nueva institución funcionase había que dotar al centro de las instalaciones imprescindibles. Para ello se construyó una nueva galería paralela a la calle Doña Carolina Álvarez y, en septiembre de 1916, ingresaron los primeros colegiales.
El estallido de la guerra civil supuso un corte abrupto, tanto en la historia del edificio como en la del colegio mayor. Por una parte se recortó el jardín para ampliar la plaza y, por otra, el castillo fue ocupado por grupos de milicianos de filiación anarquista. Después de la guerra se reanudaron las actividades del colegio que han proseguido, ininterrumpidamente, hasta el día de hoy.
La ley 16/1985, de 25 de junio declaraba el antiguo castillo de Burjassot como Bien de Interés Cultural. Ahora bien, no obstante el rico patrimonio histórico y artístico que el Colegio Mayor San Juan de Ribera reúne, su mayor riqueza es el conjunto de universitarios que en esta institución se han formado.
Autores
BTT Estudio
Fecha
1960